En la mesa redonda del 5 de marzo sobre atención
a la diversidad pudimos contar con Laura Flamarique, orientadora de Sta. Catalina Labouré, Lara Hierro: orientadora de Carmelitas, Diana González, profesora de PCPIE en
el instituto Mª Ana Sanz y Fermín
Yerro Alumno del PCPIE y miembro del proyecto Los espcpiealista.
Lara Hierro y Laura Flamarique nos hablaron sobre sus
centros y sobre como enfocan la atención a la diversidad contando con la
inestimable ayuda de sus profesores, que están muy concienciados con el tema,
que ven la atención a la diversidad como
algo necesario y no como una imposición u obligación. En los dos centros
podemos encontrar aulas de transición, o lo que es lo mismo, aulas de educación
especial integradas en un centro ordinario.
Ambas coincidían en la idea de que
la atención a la diversidad no solo se refiere a alumnos con problemas sino que cada persona es diferente, con sus
características propias, y que cada alumno del centro constituye esa diversidad.
Además, nos transmitieron la fuerza con la que luchan por
que los alumnos con necesidades especiales no abandonen la educación
tempranamente sino que sigan adelante hasta llegar hasta la universidad o hasta
tener una formación profesional con la que incluirse en el mundo laboral y su lucha
para que las ayudas a estos alumnos no se queden en el centro escolar sino que
sigan hasta estos niveles superiores de educación.
También coincidían en que el
punto clave era la autoestima, que estos
alumnos aprenden y aprendan bien y sobre todo, que se sientan a gusto.
Diana González y Fermín Yerro,
nos explicaron conjuntamente en que
consistían los PCPIE y como era el trabajo diario en su centro, María Ana Sanz.
En su exposición destacan las ideas de que es importante que
estos alumnos estén conectados con el mundo exterior, y de la importancia que
tienen las redes sociales para darse a conocer y dar a conocer su trabajo.
Estos alumnos no tienen libros de texto y tampoco un horario
escrito, por lo que no saben que clases o salidas van a tener al día siguiente,
ellos saben a cada momento lo que tienen que hacer y no lo que les espera en un
futuro.
También destaca la importancia de la ruptura de barreras a la hora de trabajar con estos alumnos, las
barreras del aula, con salidas y las barreras temporales gracias a Internet.
No obstante, los PCIPE solo abarcan hasta los 21 años, ¿y
luego? ¿Qué pasa después con estos alumnos? Para no romper la atención a la
diversidad y seguir formando a estos alumnos, el centro ha conseguido un año
más para trabajar con ellos.
De esta
mesa redonda, la idea que sacamos es que es importante
trabajar con ilusión y ganas, con todos los alumnos, ya que todos ellos son
diversidad, y no solo los alumnos con problemas.
Nuria
Corredera Barba
Naiara
Fernández Ibáñez
Nerea Antoñanzas
Molina
María
Domenech García- Augustín
Patricia
Olmedo Ariza
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